Como últimamente hago las cosas un poco improvisadas, este jabón es muestra de ello. Con una técnica de jarras de colores donde voy vertiendo, en la base natural, un color encima de otro, creando un efecto muy bonito de aguas mezcladas e irrepetible.
El aceite de rosa mosqueta* en el sobreengrasado de este jabón, aporta juventud y luminosidad a la piel. Es un potente antioxidante ya que es excepcionalmente rico en ácidos grasos esenciales poliinsaturados, que le confiere una acción regenerante celular, reduciendo las arrugas y eliminando las arrugas superficiales y cicatrices recientes. Hace que la piel recupere su textura y coloración natural, actuando contra manchas cutáneas. Igualmente reduce y elimina las estrías ya existentes.
Además lleva maceración de pétalos de rosas* en aceite de oliva virgen extra*, aceite de coco*, manteca de karité* y cacao*, agua, sosa, vitamina E, pigmentos minerales y fragancia de rosas.
*Biológico.
Espero que os guste.